¿'El Betito’ peleó con los Beltrán Leyva en Tamaulipas? Estos son los rumores de los comienzos del exlíder de La Unión Tepito

Roberto Moyado Esparza o José Alberto Maldonado López, alias ‘El Betito’, fue recurrentemente objeto de rumores y especulaciones en torno a su trayectoria delictiva, entre las cuales se mencionaba que fue entrenado por el grupo criminal de ‘Los Pelones’, el brazo armado de los Beltrán Leyva.

Contrario a las historias que lo vinculaban con un supuesto enfrentamiento en Tamaulipas a lado del Cártel de ‘Los Tres Caballeros’ o su entrenamiento a manos de los ‘Pelones’, un grupo de gatilleros de élite, investigaciones recientes han revelado que estos hechos carecen de fundamento.

Cabe mencionar que este grupo armado ganaba millones de pesos por asesinar a personas en el noreste del país, siendo una de las organizaciones más peligrosas de los años 2000.

“Corrían rumores de que Roberto Moyado Esparza, ‘El Betito’, había peleado en Tamaulipas con los Beltrán Leyva, que había sido adiestrado por los famosos ‘Pelones’, gatilleros de alta escuela que se servían a los capos y cobraban millones, pero nada de eso era verdad, ‘El Betito’ forjó su perfil criminal en las calles, y ya sea por gusto a disciplina, entrenaba tiro con su equipo fuera de la ciudad”, narró el autor del libro ‘Cártel Chilango’, Antonio Nieto.

La realidad era que ‘El Betito’ desarrolló su perfil criminal en las calles de la Ciudad de México, perfeccionando sus habilidades en el manejo de armas fuera del ámbito urbano con su equipo cercano.

Los orígenes de ‘El Betito’ en el crimen organizado se sitúan lejos de los escenarios de combate y adiestramiento que se le adjudicaban. En su lugar, su verdadero proceso de formación criminal estuvo marcado por la ‘disciplina’ y el entrenamiento constante en áreas apartadas de la capital del país.

Este enfoque en la capacitación en tiro y estrategia difiere significativamente de las narrativas que lo vinculaban con organizaciones y personajes de renombre dentro del narcotráfico mexicano.

Los rumores sobre su supuesta alianza con los Beltrán Leyva y la capacitación por los ‘Pelones’ no solo engrandecían su figura, sino que también distorsionaban la percepción sobre su verdadera influencia y operaciones.

La estrategia de Moyado Esparza para mejorar sus habilidades en el manejo de armas de fuego era peculiar. Se reporta que solía asistir al menos una vez al mes a juegos de gotcha con amigos, utilizando estos encuentros como una forma de entrenamiento.

Esta práctica tenía el objetivo de incrementar su agilidad y preparación para situaciones de confrontación real. Este enfoque en el entrenamiento físico y táctico fue un pilar en su desarrollo dentro del mundo criminal.

‘El Betito’, inició su carrera en el mundo del crimen en Tepito, un área notoria por su alta actividad criminal.

Desde su adolescencia, ‘El Betito’ fue identificado como participante en diversos delitos, incluyendo robos y presuntamente involucrado en un homicidio, aunque este último no se ha comprobado definitivamente.