Los legisladores suizos respaldaron el jueves por estrecho margen medidas para permitir el uso de activos estatales rusos congelados para financiar reparaciones de guerra en Ucrania.
La cuestión ha sido objeto de acalorados debates en Suiza, donde se valora mucho la discreción en el sector bancario clave y la tradición de neutralidad del país.
La cámara alta del parlamento votó 21 a 19 a favor de una serie de mociones respaldadas por el gobierno, con tres abstenciones. La cámara baja los aprobó el año pasado.
Allanan el camino para que el gobierno trabaje sobre una base legal internacional para utilizar activos congelados del Estado agresor para pagar reparaciones en los países atacados.
Más de 8.000 millones de dólares en reservas y activos del banco central ruso se encuentran en Suiza.
“Los hechos son muy claros”, dijo el ministro de Asuntos Exteriores, Ignazio Cassis, a la cámara alta del parlamento. “Rusia ha violado gravemente el derecho internacional. Por lo tanto, debe reparar el daño causado.
“Se están celebrando debates internacionales sobre los mecanismos de compensación y Suiza participa con sus conocimientos, sus capacidades y toda su historia en este ámbito”.
Berna buscará ahora establecer la base legal internacional necesaria para que se desarrolle un mecanismo de reparación a nivel global.
Su objetivo sería permitir que los fondos congelados del banco central de un agresor, o los activos de sus empresas estatales, sean transferidos legalmente a un Estado atacado.
La votación del jueves siguió a un animado debate en la cámara alta.
Existía preocupación sobre si la imagen de neutralidad de Suiza podría verse perjudicada y si Suiza estaba haciendo lo suficiente cuando había guerra en Europa.
Cassis argumentó que desde la invasión rusa a gran escala de Ucrania en febrero de 2022, Suiza había apoyado a las poblaciones afectadas con alrededor de tres mil millones de francos suizos (3,4 mil millones de dólares).
El gobierno también pretende gastar alrededor de 1.500 millones de francos suizos en Ucrania y la región entre 2025 y 2028. Suiza también planea albergar una conferencia de paz a finales de este año.
“No tenemos por qué sonrojarnos cuando hablamos de Ucrania en el escenario internacional”, dijo Cassis, ya sea en el frente financiero, diplomático o humanitario.
La posición de larga data de Suiza es la de una neutralidad militar bien armada.
Se ha negado a enviar armas a Kiev o a permitir que los países que poseen armamento fabricado en Suiza lo reexporten a Ucrania.
Pero ha igualado las sanciones económicas de la Unión Europea a Rusia.
El Ministerio de Asuntos Económicos dijo en mayo del año pasado que 7.400 millones de francos suizos en reservas y activos del banco central ruso se encontraban en Suiza.
Suiza también ha congelado 7.500 millones de francos suizos en fondos y activos rusos propiedad o controlados por personas, empresas o entidades sancionadas, dijo el ministerio en ese momento.
El país es desde hace mucho tiempo un destino favorito para los rusos ricos y sus activos.
La Asociación de Banqueros Suizos estima que en marzo de 2022 los clientes rusos tenían aproximadamente 150 mil millones de francos suizos en bancos en Suiza.
(Con información de AFP)