De la cárcel a codearse con estrellas de Hollywood: la historia del ex pandillero que cocina para los famosos

Keith Corbin es un ex carcelario y en la actualidad un chef ejecutivo, nacido en Watts, Los Ángeles, Estados Unidos. Es copropietario del restaurante Alta Adams en Los Ángeles y logró convertir al establecimiento en un punto de encuentro esencial tanto para la comunidad local como para Hollywood, sobre todo estrellas afroamericanas. Y lo consiguió gracias a su innovadora propuesta culinaria que incluye platos insignia como los tacos de plátano asado. Su travesía, marcada por una década en prisión, lo llevó a desarrollar lo que él denomina “California Soul”.

Criado en el barrio de Jordan Downs, Corbin enfrentó una realidad complicada similar a la de otros jóvenes en comunidades desfavorecidas. Fue absorbido por el entorno de las pandillas y la delincuencia relacionada con drogas. Así, terminó con una condena que lo mantuvo en prisión durante una década por delitos vinculados a sustancias ilegales, armas y robos. Estuvo encarcelado desde el 2003 hasta el 2014.

El actual chef advirtió que dentro de la prisión hay más talento del que se cree. Dijo a The Guardian: “Hay gente allí que literalmente nunca fue a la escuela de tecnología, pero el teléfono se rompe y descubrirán cómo arreglar la placa base. Hay genios ahí, ingenio”. Él mismo es un ejemplo de la capacidad que se desarrolla tras las rejas por los bajos recursos. Mientras trabajaba como chef en la cárcel, muchas veces quería cocinar y agregar sabores. Para eso se las tenía que ingeniar y hacer mezclas con los escasos ingredientes.

Corbin recalca la universalidad del alma en la cocina. La ve como un puente de conexión humana más allá de las barreras raciales o culturales, que evoca la memoria de aquellos esclavizados que encontraban consuelo en la comida preparada con amor. Dijo: “La gente tiende a darle alimento para el alma a una región, una cultura o una raza. Miro la comida para el alma en busca de la intención”.

La cocina de Corbin, influenciada por las enseñanzas de su abuela y la necesidad de ser creativo con recursos limitados en prisión, resalta los sabores de la cocina soul con un toque californiano. Estas dos cuestiones reconectan sus raíces y lo lleva a ofrecer un espacio de acogida para todos.

Si bien en la cárcel encontró la creatividad al cocinar, que antes no tenía, su primera conexión con la cocina fue por su abuela que cocinaba para varias personas de su comunidad. “Ese amor por alimentar a la gente fue mi primera conexión con la comida”, contó.

El camino de Corbin hacia la rehabilitación y la redención incluyó el desafío de ser aceptado de nuevo por su comunidad. Por su esfuerzo, en 2023, obtuvo un Certificado de Rehabilitación en el Tribunal Superior de Los Ángeles. Esto es un reconocimiento de su cambio y contribución positiva. Este proceso fue respaldado por cartas de importantes figuras públicas y la comunidad, reflejando el impacto significativo de su trabajo más allá de las cocinas de Alta Adams. Además, fue nominado dos veces al premio James Beard (premio que destaca a los profesionales gastronómicos).

Antes de comenzar en las cocinas de Los Ángeles, trabajó en una refinería de petróleo. Pero cuando se enteraron de que había estado en prisión fue despedido. Entonces decidió comenzar una nueva aventura para cambiar su vida. Logró entrenar en la cocina de LocoL en 2016, un restaurante de Roy Choi y Daniel Patterson, renombrado en este mundo. En 2018 ese local cerró, pero Corbin se mantuvo estrecho a Choi y Patterson.

En ese momento nació Alta Adams, que tuvo su apertura en 2018, y terminó como un éxito. Bajo la gestión de Corbin y la asociación Patterson y Choi, se ha convertido en un oasis de alegría y confort para importantes estrellas de Hollywood y residentes por igual.

Cuando abrió Alta Adams estaba nervioso por si irían estrellas. Para su suerte, sí pasó. “Para nuestra inauguración, vino John Legend, luego Tiffany Haddish. Tracee Ellis Ross apareció y me dijo que sería la primera persona en reservar mi restaurante para un evento”, enumeró aún sorprendido en declaraciones a The Hollywood Reporter. Además, pasaron otras figuras como Jay-Z, Issa Rae, Sterling K. Brown y Sean “Diddy” Combs, entre otros.

El buen momento del nuevo restaurante los llevó a idear un plan: reabrir LocoL. Ahora con la intención de que sea como una organización sin fines de lucro. Y que desafíe la tradición de la comida rápida, dando opciones nutritivas y accesibles.

En 2022 publicó su libro: “California Soul: An American Epic of Cooking and Survival”. Narra su propio viaje de redención personal a través de la cocina y como se posicionó como un llamado a la acción para buscar la superación y el cambio positivo. Además, su intención es inspirar a generaciones actuales y futuras sobre el poder de la transformación personal y profesional.