Carlos Antonio Vélez, reconocido comentarista futbolístico, se ha distinguido por ser un crítico contundente del fútbol nacional. Recientemente, ha ampliado su foco crítico para convertirse en un firme detractor del presidente Gustavo Petro. Incluso, cuando comenta sobre deportes, el periodista encuentra momentos para expresar su desacuerdo con el Gobierno nacional.
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En esta ocasión lo hizo Vélez durante la reciente emisión de la franja de opinión de Palabras mayores, en la emisora Antena 2, desde donde destinó un par de minutos para referirse a la polémica desatada alrededor de una eventual constituyente impulsada por Petro, o el descontento desatado en la oposición por las reformas pensional y de salud.
El comentarista deportivo señaló que, a pesar de los esfuerzos que se realicen para impedirlo, las reformas sucederán de manera inevitable, desencadenando un futuro que describió como apocalíptico.
“Los billones que se embolsan con las reformas, que igual van a sacar a ‘pupitrazo’, apuntan con la Constituyente que, a los empujones, sacará también el Mesías criollo. Será el final de los tiempos. La Apocalipsis del llamado mejor vividero del mundo no será más un vividero; será el paraíso de los vividores chupasangre”.
Del mismo modo, extendió una invitación a “una reacción vigorosa” para prevenir los atropellos que, asegura, está llevando a cabo el Gobierno de Petro contra la institucionalidad: “O se da una reacción vigorosa en defensa de la democracia y del país, o nos terminaremos de joder. Advertidos estamos”.
Aunque en la franja de opinión el Gobierno no ha sido el único en ‘recibir palo’ por parte de Vélez, el Junior de Barranquilla también fue objeto de críticas, debido a que a pesar de las grandes contrataciones en un equipo que no tiene clara la clasificación en la Copa Libertadores y en la liga nacional está a un par de resultados de quedar eliminado.
“Junior es el rey de la irregularidad. Se podría morir de hambre con la nevera llena, porque no tiene muñeca, porque no administra tiempos, porque puede regular cargas, que es muy distinto a lo que representa el juego como tal, una cosa es el aspecto físico, la repartición de panes y peces, y otra cosa es el juego. Y en el juego hay vacíos porque si el técnico es plano el equipo es plano. Se salvó de que Envigado le ganara, que es una piedra en el zapato”.
El panorama de la reforma laboral
La plenaria del Senado de la República aprobó, con una mayoría de 49 votos a favor y 33 en contra, la ponencia positiva de la reforma pensional el lunes 15 de abril. Esta reforma, impulsada por el Gobierno de Gustavo Petro, representa una de las tres grandes iniciativas legislativas propuestas, logrando avanzar después de siete meses de espera para su segundo debate en la corporación.
A diferencia de otras propuestas del Gobierno, como la reforma a la salud, rechazada por la Comisión Séptima del Senado, y la reforma laboral, que aún no avanza en la Comisión Séptima de la Cámara de Representantes, la reforma pensional parece contar con el apoyo suficiente para seguir su curso legislativo.
Esta votación marca un momento de éxito para la bancada oficialista, en el contexto de un acuerdo político clave: la reunión del presidente Gustavo Petro con 13 senadores del Partido Liberal, culminando en la decisión de reducir el umbral mínimo de cotización en Colpensiones de tres a 2,3 salarios mínimos legales. Este ajuste fue decisivo no solo para garantizar el apoyo a la iniciativa de la coalición gubernamental, sino también para desplazar una ponencia alternativa liderada por la senadora Norma Hurtado.
La iniciativa busca ampliar la cobertura del sistema pensional a través de un ingreso solidario para quienes no cotizan y una renta vitalicia para aquellos que no cumplan con los requisitos de tiempo o semanas de cotización. Esta propuesta pretende combinar de manera complementaria los regímenes públicos y privados, con el objetivo de mejorar la protección a la tercera edad y avanzar hacia una sociedad más equitativa y con mayor cobertura pensional, según expresó la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez.