Caminata afgana: la eficaz forma de caminar que activa el metabolismo y ayuda a combatir la ansiedad

Si bien la caminata es un ejercicio milenario que ha demostrado ser uno de los mejores por su accesibilidad para practicarlo y sus beneficios para la salud, es común que surjan nuevas técnicas para realizarlo y potencializar sus beneficios.

Tal es el caso de la llamada caminata afgana, la cual ha comenzado a cobrar popularidad en varios países y también es conocida como técnica de respiración afgana.

Se trata de un método de caminata y respiración desarrollado por el francés Édouard G. Stiegler en los años 80s, quien era aficionado al senderismo y se inspiró en las prácticas de los nómadas afganos para escribir un libro describiendo su método y los beneficios de practicarla.

Estos nómadas, debido a sus largas marchas por el desierto, desarrollaron una forma eficiente de caminar que les permitía recorrer largas distancias sin fatigarse excesivamente.

La técnica se centra en sincronizar la respiración con los pasos para aumentar la eficiencia del oxígeno en el cuerpo y mejorar la resistencia física. En este sentido, la base de la caminata afgana es aprender a respirar de manera rítmica, coordinando la inhalación y exhalación con un número específico de pasos.

Por ejemplo, se puede inhalar durante tres pasos y exhalar durante otros tres. Este patrón puede variar dependiendo de la capacidad respiratoria de la persona y el esfuerzo físico.

Los principios fundamentales de la caminata afgana incluyen:

• Conciencia plena y focalización: Prestar atención a la respiración y los movimientos del cuerpo para crear un estado de conciencia plena que ayude a mejorar la concentración.
• Sincronización: Alinear de manera consciente la respiración con los pasos mejora la economía de movimiento y aumenta la capacidad para caminar largas distancias con menos fatiga.
• Adaptabilidad y flexibilidad: La técnica puede adaptarse según las necesidades y condiciones físicas del individuo, permitiendo que personas de diversas edades y niveles de condición física la practiquen.
• Mejora del bienestar general: Practicar la caminata afgana puede tener beneficios más allá de la resistencia física, como reducir el estrés, mejorar la capacidad pulmonar y promover un estado de bienestar mental.

La caminata afgana se ha popularizado en diferentes partes del mundo como una técnica de marcha y respiración que favorece la salud y el rendimiento físico.

Al combinar la actividad física de caminar con una técnica específica de respiración, proporciona diversos beneficios para la salud física y mental, entre los que se encuentran los siguientes:

• Mejora la capacidad respiratoria: Al enfocarse en la respiración profunda y sincronizada, incrementa la capacidad pulmonar y mejora el intercambio gaseoso en los pulmones, lo cual puede beneficiar a quienes practican regularmente.
• Aumenta la resistencia física: La coordinación de la respiración con los pasos ayuda a gestionar mejor el esfuerzo y la energía, permitiendo caminar mayores distancias sin fatigarse rápidamente.
• Reduce los niveles de estrés y ansiedad: El enfoque en la respiración y la conciencia plena durante la caminata favorece un estado de relajación mental, ayudando a reducir el estrés y la ansiedad.
• Mejora la circulación sanguínea: La actividad física moderada, como la caminata, promueve la circulación sanguínea, lo cual es beneficioso para la salud cardiovascular.
• Optimiza el consumo de oxígeno: Al aprender a respirar más eficientemente, el cuerpo puede utilizar el oxígeno de manera más efectiva, lo que optimiza el rendimiento físico y la función de los órganos vitales.
• Estimula el metabolismo: La combinación de ejercicio y una técnica de respiración adecuada puede contribuir a un metabolismo más activo, lo cual es un factor importante para el control del peso y la salud general.
• Favorece la conciencia y conexión mente-cuerpo: Practicar la caminata afgana ayuda a desarrollar una mayor conciencia de las señales del cuerpo y la mente, fomentando un mayor equilibrio y bienestar interior.
• Mejora la calidad de sueño: La reducción del estrés y la actividad física regular contribuyen a mejorar la calidad del sueño, ya que el cuerpo puede relajarse y descansar adecuadamente después de la práctica.

• Incrementa la capacidad de concentración: El enfoque requerido para coordinar la respiración con los pasos durante la caminata puede mejorar la capacidad de concentración y la claridad mental.
• Promueve la salud cardiovascular: Al ser una actividad física aeróbica, ayuda a fortalecer el corazón, reducir la presión arterial y disminuir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.

Incorporar la caminata afgana en la rutina diaria puede ser una estrategia efectiva para mejorar la salud y el bienestar general debido a que ofrece un enfoque holístico que beneficia tanto el cuerpo como la mente.