Éstas son las estaciones del Metrobús CDMX con baño público gratuito

Al menos 950 mil personas utilizan diariamente alguna de las siete estaciones del Metrobús de la Ciudad de México, lo que lo convierte en una de las formas de movilidad más usadas por las y los capitalinos. Sin embargo, pocas y pocos usuarios saben que algunas de las 283 estaciones que integran este sistema de transporte cuentan con baños públicos gratuitos en su interior. Aquí te contamos de cuáles se trata, en caso de que en algún momento se te presente una emergencia.

En ocasiones, la necesidad de ir al baño surge de manera imprevista. Las causas son diversas: desde la ingesta de líquidos; el tiempo excesivo de traslado; la respuesta natural del cuerpo a la digestión; el consumo de alimentos diuréticos o laxantes que aumentan la necesidad de orinar o defecar; condiciones médicas específicas; o incluso la ansiedad o nerviosismo que algunas personas pueden experimentar.

Aunque en la mayoría de las zonas en donde transcurren los 125 kilómetros de Metrobús se encuentran en puntos accesibles y concurridos, donde es posible que hayan baños públicos con precios asequibles, destaca que 11 estaciones de este sistema de transporte cuentan con sanitarios a los que no sólo los oficiales pueden acceder, sino también los usuarios.

Se trata de:

• Indios Verdes - Línea 1
• Buenavista II - Línea 4
• Buenavista III - Línea 3
• Ciudad Universitaria - Línea 1
• Centro Cultural Universitario - Línea 1
• Plaza de la República - Línea 1
• Félix Cuevas - Línea 1
• Santa Úrsula - Línea 1
• El Caminero - Línea 1
• Ayuntamiento - Línea 1
• Villa Olímpica - Línea 1

Cabe destacar que, tal y como lo ha informado Metrobús, el uso de estos sanitarios son completamente gratuitos.

En algunas ocasiones, las y los usuarios del Metrobús han reportado que los oficiales no les permiten el acceso, lo cual está prohibido. En caso de que llegues a vivir una situación similar, no olvides emitir el informe correspondiente a través de algún canal oficial del transporte público, como alguna de sus redes sociales.

Resistirse a la necesidad de ir al baño, ya sea por orinar o defecar, puede tener consecuencias significativas para la salud. Ignorar estos impulsos corporales conlleva riesgos que impactan tanto en el sistema urinario como en el digestivo.

En el caso de retener la orina frecuentemente, se puede provocar una distensión de la vejiga. Esto significa que el órgano se va estirando y puede perder la capacidad de contraerse adecuadamente, dificultando la eliminación completa de la orina.

La distensión de la vejiga aumenta el riesgo de infecciones urinarias, ya que la orina retenida puede servir de cultivo para el crecimiento de bacterias. A largo plazo, el riesgo puede extenderse a los riñones, con posibles infecciones renales o incluso daño renal.

Por otro lado, evitar defecar cuando el cuerpo lo solicita puede llevar a un endurecimiento de las heces, haciendo que su expulsión sea más difícil y dolorosa. Esta práctica puede contribuir al desarrollo de hemorroides, debido al esfuerzo excesivo y al estreñimiento crónico.

A su vez, el estreñimiento prolongado puede derivar en complicaciones más graves, como fisuras anales, que son pequeñas rupturas en la piel alrededor del ano, o incluso en el desarrollo de un fecaloma; un bloqueo intestinal causado por una masa de heces endurecidas.

Por tanto, es vital prestar atención a las señales que el cuerpo envía y procurar mantener hábitos saludables que promuevan un sistema digestivo y urinario funcionando adecuadamente. Ignorar estas necesidades básicas puede tener consecuencias a largo plazo para la salud.