¿Quién es María de los Ángeles Ramírez Arvizu, líder del Cártel de Tláhuac y la mujer más buscada en la CDMX?

El Cártel de Tláhuac es una organización criminal que opera principalmente en la Ciudad de México, en la delegación Tláhuac y otras áreas colindantes. Surgió en torno a actividades de narcotráfico, extorsión, secuestro, y control de la venta de drogas al menudeo. Con el paso del tiempo, esta organización ha extendido sus operaciones incluyendo otros delitos como el robo de combustible.

La presencia de este cartel ha generado diversos enfrentamientos con las fuerzas de seguridad, resultando en operativos para desarticular sus redes de operación. El enfrentamiento más significativo ocurrió en julio de 2017, cuando una estrategia para capturar a Felipe de Jesús Pérez Luna, alias “El Ojos”, líder de la organización, derivó en un enfrentamiento armado que culminó con su muerte y varios miembros del Cártel.

Desde entonces, el Cártel de Tláhuac ha experimentado fracturas y cambios. Actualmente, la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ-CDMX) está ofreciendo una recompensa por información que conduzca a la captura de María de los Ángeles Ramírez Arvizu, viuda de “El Ojos” y presunta actual líder del grupo criminal, quien se encuentra probablemente relacionada con el delito de asociación delictuosa y cuenta con una orden de aprehensión en su contra.

María de los Ángeles Ramírez Arvizu emergió como figura clave en el panorama criminal de la capital tras el abatimiento de su esposo en julio de 2017. Desde la muerte de “El Ojo” las autoridades han señalado a Ramírez Arvizu como la sucesora en el liderazgo de esta organización criminal, asumiendo el control de las operaciones ilícitas predominantes en la delegación Tláhuac y zonas aledañas.

Bajo su mando se ha informado que el Cartel de Tláhuac continúa su involucramiento en actividades de narcotráfico, extorsión, y posiblemente en otros delitos. Los reportes sugieren que Ángeles Ramírez ha mantenido y posiblemente extendido las redes de distribución y venta de droga en la capital, enfrentándose a grupos rivales como “La Unión Tepito” y “Los Rodolfos” en la disputa por el control territorial y el mercado ilegal.

A pesar de la presión ejercida por las operaciones de inteligencia y los esfuerzos policiales, María de los Ángeles Ramírez Arvizu ha logrado evadir la captura, demostrando un alto grado de astucia y capacidad para mantenerse en las sombras.

Esto ha llevado a la Fiscalía de la CDMX a ofrecer una recompensa de 500 mil pesos por información que conduzca directamente a su aprehensión, enfatizando su posición como objetivo prioritario dentro del programa de recompensas para capturar a generadores de violencia.

La estructura familiar y los lazos de lealtad parecen jugar un rol fundamental en la organización del Cartel de Tláhuac. Ramírez Arvizu, quien no se haya vuelto a casar según los registros, ha logrado permanecer en el poder junto con varios de sus hijos desempeñando roles activos dentro de la estructura criminal.

María de los Ángeles Ramírez Arvizu y Felipe de Jesús Pérez Luna fueron padres de ocho hijos a lo largo de su relación. Sus descendientes son Liliana, Miguel, Diana Karen, Luis Felipe, Samantha, Estefanía, Monserrat y Kateryn Pérez Ramírez, pero de ellos la Fiscalía sólo ofrece una recompensa de medio millón por Liliana y Samantha.

Liliana está presumiblemente implicada en actividades de asociación delictuosa, posiblemente encargándose de la venta y distribución de drogas en Tláhuac bajo las órdenes de su madre. Samantha se sospecha que actúa como la operadora financiera del Cartel de Tláhuac, con probable responsabilidad en la comercialización y distribución de narcóticos.

Felipe de Jesús Pérez Luna, conocido por su alias ‘El Ojos’ y señalado como líder y fundador del Cártel de Tláhuac, encontró su fin en un violento enfrentamiento con elementos de la Marina. Este suceso tuvo lugar el jueves 20 de julio de 2017, transformando las calles de la colonia La Conchita Zapotitlán en escenario de una cruenta batalla que no solo acabaría con la vida del notorio capo, sino también con la de al menos siete de sus sicarios.

El operativo se desencadenó cuando, en un recorrido por la demarcación, los marinos intentaron realizar una inspección de rutina a un grupo de individuos que les parecieron sospechosos. Estos, lejos de acatar las órdenes, se dieron a la fuga hacia un domicilio donde se encontraba Pérez Luna.

El reporte oficial recabado en el libro ‘Narcos de México’, narra cómo al intentar efectuar la detención, los marinos fueron recibidos a balazos, dando inicio a un intenso tiroteo que culminaría con la muerte de ‘El Ojos’.

Inicialmente, los residentes de la calle Simón Álvarez fueron ajenos al peligroso ajedrez que se estaba jugando en su vecindario. La llegada sigilosa de más de 80 efectivos y tres unidades militares no levantó sospechas hasta que las detonaciones rompieron la calma. Lo que siguieron fueron momentos de pánico, gritos y, finalmente, un silencio.

El saldo de este operativo fue de ocho muertos, entre ellos ‘El Ojos’, cuyo cuerpo fue hallado en el interior de una camioneta Caravan de color verde. Aparentemente, el capo había intentado huir, pero los múltiples impactos de bala frustraron su escape.

La muerte de Felipe de Jesús Pérez Luna no solo representó un golpe al Cártel de Tláhuac sino que también desató una ola de furia entre sus seguidores. En un hecho sin precedentes, éstos salieron a las calles para protestar violentamente contra la autoridad, armando pancartas y realizando pintas en unidades de transporte público, clamando justicia para quien consideraban no sólo un líder sino también un proveedor de empleos y estabilidad en su comunidad.