Nueva asonada en Nariño: comunidad trató de impedir la destrucción de un laboratorio de cocaína de las disidencias de las Farc

Una nueva asonada fue denunciada por las Fuerzas Militares de Colombia. De acuerdo con la institución, los hechos se registraron en el sector de Alto Mira y Frontera, zona rural del municipio de Tumaco, en el departamento de Nariño, donde a punta de machetes y armas cortopunzantes, la comunidad intentó impedir el avance de las tropas.

“Lo que parecía un procedimiento rutinario para las Fuerzas Militares se convirtió en una hostil asonada para impedir la neutralización de un complejo perteneciente a la estructura criminal Iván Ríos-Segunda Marquetalia”, comunicó la institución.

De acuerdo con las Fuerzas Militares, los hechos ocurrieron durante un procedimiento rutinario enmarcado en el Plan de Campaña Conjunto Estratégico Ayacucho -Tiempo 2-, en el que unidades de la Fuerza de Tarea Conjunta Hércules ubicaron un laboratorio de procesamiento de clorhidrato de cocaína.

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La institución indicó que el laboratorio, con capacidad para producir entre 3 y 4 toneladas de clorhidrato de cocaína al mes, presuntamente estaría vinculado al subsistema de finanzas ilegales de la facción Iván Ríos de la Segunda Marquetalia, de la autodenomina Coordinadora Guerrillera del Pacífico de las disidencias de las Farc.

“Los hechos se presentaron en la vereda La Bodega, donde se inició un combate de encuentro contra integrantes de esta estructura criminal que se encontraban custodiando el complejo ilegal, quienes al verse superados, tuvieron que sacar todos los elementos y precursores utilizados para la elaboración del alcaloide por el rio Mira, el cual sirve como corredor de movilidad estratégico para estos delincuentes”, informaron las Fuerzas Militares.

Fue así como después del combate, durante el registro del área donde se encontraba el laboratorio, los uniformados se encontraron con que, en un intento por impedir el paso por la zona, el grupo al margen de la ley había instalado 34 minas antipersonales y 17 iniciadores, los cuales según las FF.MM, fueron desplegados estratégicamente para ser activados al ingreso de los soldados.

Las Fuerzas Militares así mismo denunciaron que el grupo armado habría instrumentalizado a entre 100 y 200 pobladores para que interfirieran con las operaciones militares.

De acuerdo con la institución, “las personas llevaban machetes, armas cortopunzantes e iban encapuchados”.

Una vez superadas las minas antipersona, y controlada la asonada, en la inspección del laboratorio, los uniformados hallaron más de 200 kilogramos de clorhidrato de cocaína, junto a más de 5.000 galones de insumos líquidos y 200 kilogramos de materiales sólidos utilizados en la fabricación del narcótico, incluyendo permanganato de potasio, cloruro de calcio, entre otros precursores químicos.

En el operativo también se halló equipamiento especializado para la producción de cocaína, tales como prensas hidráulicas, compresores, hornos microondas, electrobombas y dispositivos conocidos como “marcianos”, utilizados para la destilación de la sustancia ilegal debido a su distintiva estructura metálica.

De acuerdo con las Fuerzas Militares, “este complejo estaría avaluado en más de dos mil millones de pesos, dinero con el cual, esta estructura criminal financiaba sus acciones criminales en contra de la población civil y la Fuerza Pública en esta zona del departamento de Nariño”.

En el momento, las Fuerzas Militares informaron que en la zona donde ocurrieron los hechos, la Fuerza de Tarea Conjunta Hércules mantiene su despliegue operacional en la región, con el propósito de localizar más instalaciones destinadas al procesamiento de drogas y, de esa manera, impactar significativamente en las capacidades logísticas y operativas de las disidencias de las Farc.

El operativo más reciente del que se tenía conocimiento se había registrado en las últimas horas en el sur del departamento de Cauca en los límites con el departamento del Putumayo, donde las Fuerzas Militares hallaron 197 artefactos explosivos. El material, que al parecer pertenecía a las disidencias de las Farc, estaba acondicionado para ser lanzado desde drones contra la población civil y la Fuerza Pública.