IOTA: cuál es el valor de esta criptomoneda

Esta moneda digital está diseñada para utilizarse como medio de pago a través de todos los dispositivos que forman parte de una sola red sin tarifas de transacción adicionales

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IOTA no se basa en la blockchain como otras criptomonedas, sino en una arquitectura Tangle cuya meta es incorporar a las monedas digitales en el internet de las cosas. (Infobae)
IOTA no se basa en la blockchain como otras criptomonedas, sino en una arquitectura Tangle cuya meta es incorporar a las monedas digitales en el internet de las cosas. (Infobae)

IOTA es una de las criptomonedas que están cambiando el mercado de las monedas digitales, pues a diferencia de sus competidoras como el bitcoin o ethereum, se basa en una tecnología totalmente distinta al blockchain en donde no se habla de minas ni de mineros.

Para los expertos en finanzas, IOTA es una apuesta ambiciosa y muy arriesgada cuyo objetivo principal es incorporar a las divisas digitales en una sola red, el internet de las cosas.

Costo de la criptomoneda iota

El valor de la criptomoneda iota para este día a las 10:30 horas (UTC) es de 0.227266 dólares. Esto quiere decir que la moneda digital reportó un cambio de 4.14% en las últimas 24 horas, así como un movimiento de 0.07% en la última hora.

Por su nivel de capitalización, esta moneda digital ocupa la posición #101 entre las más populares.

Información destacada sobre Iota

Creada poruna fundación alemana, la divisa digital usa una tecnología o arquitectura llamada Tangle enfocada en el Gráfico Acíclico Dirigido (DAG, por sus siglas en inglés) que entre otras cosas se caracteriza por ser más amigable, pues se pueden hacer transacciones con tan solo tener un celulary un ordenador, al tiempo que no consume tanta energía como una red blockchain.

Además, estas operaciones las pueden realizar los usuarios que operan con IOTA y no hay comisiones por operaciones porque sus usuarios deben hacer otras transacciones ajenas antes de materializar las propias.

La tecnología de IOTA garantiza que los usuarios de esta criptomoneda tengan un entorno más confiable que el que la red blockchain puede dar, pues en ésta última se permite que las transacciones se hagan de forma asíncrona, ordenada y lenta por motivos de seguridad; mientras que el Tangle permite hacer operaciones paralelas.

El suministro máximo con el que cuenta IOTA es de 2 mil 779 millones 350 mil 283 tokens y la meta es lograr que se hagan microtransacciones de hasta 0.001 dólar sin tener que abonar tasas por procesamientos de pago. En cada operación se requiere la “semilla”, que es un código de 81 caracteres generado aleatoriamente y que previene el robo de fondos.

Entre sus ventajas está su resistencia a la computación cuántica, millones de veces más rápido que la conocida hoy día; sin embargo, una de sus debilidades es la seguridad, pues en 2017 afrontó un hackeo que provocó un rompimiento en su precio y la pérdida en el volumen de las transacciones.

Todo sobre las criptomonedas

Las criptomonedas están dejando de ser elementos extraños y han comenzado a meterse en el lenguaje cotidiano, despertando el interés de aquellos a quienes les preocupan las finanzas o hasta llegar al grado de ser legalizadas en algunas regiones del mundo.

Representaciones físicas de varias criptomonedas. (REUTERS/Edgar Su)
Representaciones físicas de varias criptomonedas. (REUTERS/Edgar Su)

Como su nombre lo dice, las divisas digitales utilizan métodos criptográficos o de cifrado para realizar transacciones en un sistema desregulado y, la mayoría de ellas, por medio de cadenas de bloques (blockchain), lo que lo aleja de los modelos tradicionales en donde los bancos funcionan como intermediarios.

Su innovación ha ocasionado que muchas personas estén interesadas en invertir en las monedas digitales, pues su valor ha crecido considerablemente en los últimos años siendo bitcoin, ethereum y dogecoin las más populares y las que mayor capitalización cuentan en el mercado.

Cada una de estas unidades son creadas a través de un proceso llamado “minado” y los usuarios las pueden adquirir a través de distintos agentes o bolsas de monedas virtuales, para luego almacenarlas en “monederos criptográficos” o hacer diversas transacciones con ellas por medio de claves únicas.

Pese a que fue en el 2009 cuando el bitcoin entró al mercado como la primera criptodivisa en el mundo, lo cierto es que éstas apenas están experimentando un auge en el ámbito financiero, por lo que se espera que su uso vaya en aumento en un futuro cercano.

Los riesgos

Las criptomonedas tienen distintas características que las hacen únicas: el no estar controladas por ninguna institución; no requerir de terceros en las transacciones; y casi siempre usar bloques contables (blockchain) para evitar que se creen nuevas criptomonedas de forma ilegal o las transacciones ya hechas sean modificadas.

Un cajero para comprar criptomonedas. (EFE/EPA/JUSTIN LANE/Archivo)
Un cajero para comprar criptomonedas. (EFE/EPA/JUSTIN LANE/Archivo)

Sin embargo, al no tener reguladores como un banco central o entidades similares se les señala de no ser confiables, de ser volátiles, propiciar fraudes, no tener un marco legal que respalde a sus usuarios, permitir la operación de actividades ilegales, entre otras más.

Aunque podría ser una paradoja, a su vez las criptomonedas garantizan seguridad a sus mineros en cuanto a la red en la que se sitúa (entramado) y que implica un manejo de códigos; el hackear esta seguridad es posible pero difícil , pues quien lo llegara a intentar tendría que contar con una potencia computacional superior incluso a la que tiene el propio Google.

Quien invierte en este tipo de activos digitales debe tener muy claro que esta forma trae consigo un elevado riesgo al capital, pues, así como puede haber un incremento, también puede tener inesperadamente un desplome y acabar con los ahorros de sus usuarios.

Para almacenarlas, los usuarios deben contar con un monedero digital o wallet, que en realidad es un software a través del cual es posible guardar, enviar y hacer transacciones de las criptomonedas. En realidad, este tipo de monederos únicamente guarda las claves que marcan la propiedad y el derecho de una persona sobre cierta criptomoneda, por lo que estos códigos son los que en realidad se deben proteger.