Alerta climática en Colombia: lluvias torrenciales y tormentas eléctricas afectarán a 31 departamentos

El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) emitió una alerta para 31 departamentos del país, advirtiendo sobre la inminente llegada de lluvias torrenciales y tormentas eléctricas durante esta semana, del 23 hasta el 26 de abril de 2024.

Esta prevención surge en un momento crucial, ya que gran parte del territorio nacional se encuentra en necesidad de precipitaciones tras enfrentar un período de sequía, exacerbado por el fenómeno de El Niño.

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La transición hacia la fase de La Niña, caracterizada por un aumento en las precipitaciones, se interpreta como una esperanza para la recarga de los embalses que proveen de agua al país.

El Ideam especificó que las condiciones climáticas variarán desde lluvias moderadas hasta intensas a lo largo y ancho de casi todo el territorio colombiano. Los pronósticos indican que dichas condiciones serán particularmente severas en áreas como Córdoba, Sucre, Bolívar, entre otros, donde no solo se esperan precipitaciones, sino también tormentas eléctricas.

En Bogotá se anticipan cielos mayormente nublados con lluvias de ligeras a moderadas, especialmente intensificándose en las tardes y noches del martes 23 de abril.

Para el martes 23, se espera que la región Caribe enfrente precipitaciones en la Sierra Nevada de Santa Marta y el sur de Magdalena y Cesar. La región Pacífica tendrá lluvias ligeras en Valle del Cauca, Cauca y Nariño, mientras que los departamentos andinos tendrán cielos mayormente cubiertos con posibilidades de precipitaciones.

El miércoles 24 de abril habrá un incremento en el volumen de las lluvias en gran parte del país, con especial atención en las regiones Andina y Pacífica, así como en algunas zonas de la Orinoquía y la Amazonia.

Continuando con esta tendencia, el jueves 25 se proyecta un aumento en la intensidad de las lluvias en lugares como La Guajira, Cesar, Magdalena y otros departamentos.

Finalmente, el viernes 26 concluirá esta ola de precipitaciones con lluvias variando de ligeras a moderadas en varios departamentos, marcando el cierre de una semana significativa en términos meteorológicos para Colombia.

Estas condiciones climáticas no solo buscan aliviar la situación de sequía que ha afrontado el país, sino que también plantean desafíos en términos de preparación y respuesta ante posibles inundaciones o daños asociados a las tormentas eléctricas.

Esta semana, Bogotá se prepara para enfrentar dos días de descargas eléctricas, además de las precipitaciones habituales de la temporada, según indicó el Ideam. El fenómeno climático se concentrará principalmente al inicio de la semana, afectando varias localidades de la capital colombiana.

El Ideam advirtió que, además de las lluvias, localidades como Usaquén, Chapinero, Santa Fe, Candelaria, San Cristóbal, Suba y Engativá experimentarán descargas eléctricas. Estos eventos climáticos suceden en un contexto donde la ciudad celebra el leve aumento de los niveles de los embalses gracias a las recientes lluvias, lo cual suscita esperanzas de mitigar el racionamiento de agua.

La capital aún se encuentra en la temporada de lluvias anunciada a principios de abril, la cual había tenido un comienzo menos intenso de lo esperado, en parte debido al efecto del fenómeno de El Niño.

La recomendación para los habitantes de estas zonas es mantenerse preparados, portando impermeables, paraguas y calzado adecuado, especialmente aquellos que se desplacen en moto, bicicleta o utilicen transporte público o privado durante estos días. Aunque se esperan lluvias de menor intensidad en otras áreas de la ciudad y en el resto de la semana, el Ideam sugiere tomar precauciones para evitar ser sorprendidos por el mal tiempo.

Según se informa, aunque las lluvias variarán en intensidad durante la semana, siendo más intensas durante las tardes y noches, la precaución debe ser una constante ante los cambios rápidos y a veces severos del clima en la región. La capital colombiana, acostumbrada a enfrentar diversas condiciones meteorológicas, se encuentra una vez más ante el reto de adaptarse y prevalecer frente a las inclemencias del tiempo.