Congelación de diálogos de paz con el ELN depende del Gobierno: gobernador de Nariño

Ante el ultimátum del Ejército de Liberación Nacional (ELN) que exigió al Gobierno colombiano cesar los diálogos de paz regionales con el Frente Comuneros del Sur para continuar las conversaciones de paz a nivel nacional, el Gobernador de Nariño, Luis Alfonso Escobar, manifestó una postura firme y decidida sobre la continuidad de estos encuentros con la comunidad.

“La decisión de congelar o no los diálogos de paz con el ELN es un asunto del gobierno nacional”, indicó el gobernador de Nariño, que advirtió que le duelen las vidas perdidas en el conflicto y solicitó a las partes llegar a un acuerdo para que los nariñenses puedan recuperar la tranquilidad y transitar sin temor a caer víctimas de las balas o a pisar minas antipersonas.

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Escobar señaló que la transformación territorial en Nariño es inminente y se avanzará con los diálogos regionales. “Los diálogos regionales para la paz de Nariño significan la transformación del territorio, y eso es precisamente lo que estamos llevando a cabo”, expresó el gobernador.

Esta situación surge tras una reunión extraordinaria en Caracas, Venezuela, donde la delegación del ELN destacó lo que considera acciones de “perfidia, suplantación y paralelismo” en contra de sus operaciones por parte del gobierno, refiriéndose específicamente a las interacciones del ejecutivo con el Frente Comuneros del Sur.

El gobernador Escobar, en respuesta a menos de 36 horas de concluido este encuentro, reaccionó durante una entrevista con Blu Radio, enfatizando en la colaboración con el gobierno nacional para promover la participación comunitaria en el desarrollo de un plan de supervivencia autónomo. El gobernador indicó que, “este enfoque ha permitido que numerosas familias retornen a sus hogares después de períodos prolongados de desplazamiento forzado, en zonas históricamente influenciadas por el Frente Comuneros del Sur”.

Escobar destacó el impacto positivo de los diálogos regionales, mencionando específicamente la transformación de áreas como El Sande y la región rural de Samaniego, donde los proyectos productivos han empezado a cambiar la vida de las comunidades afectadas por el conflicto armado.

“A través de estos diálogos, se están creando las condiciones para que las familias puedan cambiar su vida mediante proyectos productivos acordados entre el gobierno nacional, el departamento y los habitantes de la región”, afirmó el gobernador, que reclama autonomía en las gestiones para el progreso de Nariño, independientemente de las negociaciones a nivel nacional entre el gobierno y el ELN.

Para Escobar, la prioridad es clara: erradicar la pobreza en las zonas afectadas por la presencia de grupos armados ilegales, evitando generar oportunidades para que estas organizaciones ganen legitimidad a partir de las desigualdades sociales existentes.

El gobernador hizo un llamado a la unidad y el apoyo de los nariñenses al proceso de transformación territorial, reiterando que el rumbo de los diálogos con el ELN es competencia del gobierno nacional, pero señalando la urgencia de un acuerdo que devuelva la paz y la seguridad al departamento.

“Lo que se discuta en la mesa nacional de diálogos de paz es responsabilidad del gobierno y la insurgencia del ELN. Les pido que resuelvan y acuerden las cosas, porque en Nariño la transformación no se detiene”, enfatizó el gobernador.

Finalmente, Escobar expresó su confianza en que el gobierno nacional abordará de manera efectiva la propuesta de desminado humanitario ante la mesa de diálogos con el ELN, un aspecto crítico para garantizar la seguridad y el bienestar de los habitantes de Nariño. El gobernador finalizó su intervención haciendo un llamado vibrante al cese del conflicto, priorizando el fin de una guerra que ha cobrado demasiadas vidas y ha dejado un profundo rastro de sufrimiento en la región.