Este sería el futuro de la Casa Museo de Pablo Escobar, según la SAE

Después de un largo proceso judicial, la propiedad antes vinculada al legado de narcotráfico por el cartel de Medellín, ahora se encuentra bajo nueva administración

Compartir
Compartir articulo
Las autoridades le aplicaron extinción de dominio al inmueble que funcionaba como museo de Pablo Escobar - crédito Fiscalía
Las autoridades le aplicaron extinción de dominio al inmueble que funcionaba como museo de Pablo Escobar - crédito Fiscalía

La Sociedad de Activos Especiales (SAE) tomó finalmente el control de una de las propiedades previamente pertenecientes al extinto capo colombiano, Pablo Escobar, en Medellín, conocida en la actualidad como la Casa Museo Pablo Escobar.

Cabe mencionar que este acontecimiento surge después de un prolongado proceso liderado por la SAE para obtener una orden de desalojo, lograda finalmente en febrero de 2024. Como es bien sabido, la importancia de esta residencia radica en su pasado vinculado a actividades ilícitas y como centro turístico para divulgar la vida del reconocido narcotraficante.

Ahora puede seguirnos en nuestro WhatsApp Channel y en Facebook.

“Es un inmueble que ingresó al inventario de la SAE a finales del año pasado en el marco de un proceso de extinción de dominio por parte de la Fiscalía para extensión de dominio. Eso pone a la Sociedad de Activos Especiales en la responsabilidad de hacer la debida administración del inmueble”, explicó Mauricio Urquijo, director territorial occidente de la SAE, en entrevista con Caracol Radio.

En el Museo Pablo Escobar se cuenta la historia del capo desde la voz de Nicolás Escobar, su sobrino, que al final del recorrido afirma que el objetivo de este lugar no es hacer un homenaje al crimen, sino demostrar que ese no es el camino correcto - crédito Infobae
En el Museo Pablo Escobar se cuenta la historia del capo desde la voz de Nicolás Escobar, su sobrino, que al final del recorrido afirma que el objetivo de este lugar no es hacer un homenaje al crimen, sino demostrar que ese no es el camino correcto - crédito Infobae

De otro lado, pese a que el futuro del inmueble aún es incierto, se contempla como un espacio de significación para las víctimas del narcotráfico y como fuente de enseñanza sobre los desafíos históricos de la capital de Antioquia. Es de mencionar que el inmueble llegó a manos de la SAE a finales del 2023, después de un proceso de extinción de dominio iniciado por la Fiscalía General de la Nación.

Cabe anotar que este movimiento forma parte de los esfuerzos del país por recuperar propiedades adquiridas mediante actividades criminales. Por otra parte, Urquijo, señaló la complejidad en la valoración del inmueble, desmintiendo estimaciones financieras previas y destacando la falta de certeza en el valor actual de la propiedad.

Además, la recuperación del lugar enfrentó obstáculos debido a Roberto Escobar, hermano del difunto narcotraficante, quien residía en la propiedad y buscaba establecer un contrato de arrendamiento con la entidad.

“Nosotros tramitamos como corresponde lo relativo a la ocupación, porque a partir del momento en que entra en extinción de dominio un inmueble, la persona que lo usufructúa tiene la calidad de ocupante irregular. Desde finales del año pasado intentamos la recuperación del inmueble, sin embargo, nos vimos en la necesidad de reforzar el trámite debido a que el ocupante manifestaba interés en permanecer en el inmueble y celebrar un contrato de arrendamiento”, comentó el director de la SAE, en charla con el medio de comunicación citado anteriormente.

Con la reciente adquisición por parte de la SAE, el espacio que una vez glorificó la vida de uno de los narcotraficantes más infames busca convertirse en un símbolo de resiliencia de Medellín - crédito Fiscalía General de la Nación
Con la reciente adquisición por parte de la SAE, el espacio que una vez glorificó la vida de uno de los narcotraficantes más infames busca convertirse en un símbolo de resiliencia de Medellín - crédito Fiscalía General de la Nación

Ubicada en el Poblado, Medellín, esta residencia no solo sirvió como hogar para Roberto Escobar, conocido como El Osito, sino también como un museo dedicado a la figura de uno de los mayores narcotraficantes de la historia en el país, generando controversia y atracción turística. De igual forma, durante el proceso de desalojo, las autoridades no solo inspeccionaron la propiedad, sino que también retiraron varios objetos y muebles, los cuales ahora se encuentran resguardados por la Sociedad de Activos Especiales.

Finalmente, y de acuerdo con el directivo, la intención es reorientar el uso del lugar hacia una visión que contribuya positivamente a la comunidad y la historia local. Este nuevo capítulo en la historia de la Casa Museo Pablo Escobar subraya el continuo esfuerzo de Colombia por reconciliarse con su pasado turbulento y redefinir el legado de figuras notorias como Pablo Escobar. Asimismo, la transformación propuesta para el inmueble refleja una búsqueda de justicia y memoria para las víctimas del narcotráfico y un paso más hacia la recuperación de espacios confiscados por el crimen organizado.