Exvicepresidenta Marta Lucía Ramírez lanzó pulla al Ministerio de Trabajo por denuncias de acoso laboral: “En casa de herrero...”

Luego de que se revelaran una serie de denuncias de presunto acoso laboral al interior del Ministerio de Trabajo, en cabeza de Gloria Inés Ramírez, los pronunciamientos de los sectores políticos no se hicieron esperar. Uno de los más sonados hasta ahora fue el de la exvicepresidenta Marta Lucía Ramírez, quien se fue de frente contra la cartera.

Haciendo mención del refrán “En casa de herrero, cuchara de palo”, la también exministra de Relaciones Exteriores aseveró que, siendo el Ministerio de Trabajo, hay una carente falla en hacer cumplir la ley, pero, en especial, de garantizar los derechos mínimos de sus trabajadores.

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El refrán, de acuerdo con el Centro Cervantes, se usa generalmente para referirse a “que suele faltar alguna cosa en el lugar donde es natural o fácil hacerla o conseguirla”.

“En casa de herrero (...) Incumplimiento flagrante al deber mínimo de hacer cumplir la ley y garantizar derechos de las personas al interior del Ministerio. Claramente las supuestas denuncias contra empresas atuneras privadas hacen parte de una estrategia perversa y falaz…”, fue el duro mensaje que dejó la exalta funcionaria en su cuenta de X (antes Twitter).

Ramírez lanzó la pulla a la cartera de Trabajo, citando el artículo en el que la revista Semana reveló seis casos de presunto acoso laboral al interior del Ministerio. En la publicación, el medio bogotano recopila seis denuncias de trabajadores o extrabajadores que alegan malos tratos, posible hostigamiento laboral y faltas a sus derechos por parte de dos altos funcionarios de la entidad.

Las presuntas víctimas, consultadas por el citado medio, aseguran que el acoso laboral está siendo perpetrado por el secretario general Guillermo Andrés Rojas Forero, y la directora de Inspección, Vigilancia y Control (IVC), Luz Ángela Martínez, todo bajo conocimiento de primera mano de la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez.

“Estoy en esa lista de perseguidos por el secretario general. No le importó que tenga fuero sindical, realiza movimientos dentro de la planta sin autorización de un juez, desconoce la normatividad y tampoco le interesa. Por orden expresa del secretario general se le dio la orden a mi jefe inmediato de que me bombardeara de trabajo porque, sí o sí, tengo que renunciar”, contó uno de los denunciantes a la publicación bogotana.

Según el testimonio del denunciante, cuya identidad permanece en reserva, Rojas Forero incluso llegó a amenazarlo en marzo del 2023 de tenerlo “entre ojos”, y para junio de ese año -contó a la revista Semana- fue trasladado a una subdirección interna del orden nacional a la Dirección Territorial de Bogotá, donde se le incrementó de forma exponencial su carga laboral.

El denunciante aseguró al medio que fue tal la presión que sintió que en tres oportunidades presentó su carta de renuncia, pero fue rechazada, al parecer porque había sido motivada por el acoso laboral que denunciaba. La víctima incluso intentó poner el caso en conocimiento de la ministra de Trabajo, pero no lo logró.

“Entrar a la oficina es como entrar a una cárcel: no puedes entrar con celular, los escoltas están mirando, es como un búnker”, aseguró el denunciante a la publicación bogotana.

Sobre esa y las otras cinco denuncias reveladas por la revista Semana, la senadora por el Partido Centro Democrático, María Fernanda Cabal, también usó sus redes sociales para pronunciarse.

“¡Vea pues! Indignada con Van Camps, pero muy callada con las denuncias de acoso laboral contra protegidos suyos en el Ministerio”, escribió la congresista en su cuenta de X (antes Twitter).

Hasta el momento, la ministra de Trabajo no se ha pronunciado sobre las reacciones a las denuncias de presunto acoso laboral al interior de su cartera.