Una estatua de la Virgen María "lloró" aceite de oliva

Por Lindsey Bever

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Dentro de una iglesia católica en el estado de Nuevo México, Estados Unidos, una estatua de bronce de 2 metros con la figura de la Virgen María parece estar "llorando", según cuentan sus líderes eclesiásticos.

La escultura, conocida localmente como Nuestra Señora de Guadalupe, no llora lágrimas humanas. Un investigador de la Diócesis Católica de Las Cruces afirmó que sus "lágrimas" tienen la misma composición química que el aceite de oliva tratado con perfume, un aceite sagrado usado en la Iglesia Católica para ungir a los feligreses. Pero, al parecer, este extraño episodio ha traído a personas de todas partes en busca de conversiones, confesiones y, como no, ver llorar a la estatua.

Responsables de la iglesia no dan crédito a lo que está pasando con la figura de la Virgen María y consideran que se podría tratar de un fenómeno paranormal (Iglesia Católica Nuestra Señora de Guadalupe de Nuevo México)
Responsables de la iglesia no dan crédito a lo que está pasando con la figura de la Virgen María y consideran que se podría tratar de un fenómeno paranormal (Iglesia Católica Nuestra Señora de Guadalupe de Nuevo México)

La pregunta, dice un experto, no es simplemente cómo está pasando eso (o si está ocurriendo de forma natural), sino cómo las personas están respondiendo al fenómeno y por qué quieren creer en él.

"La Iglesia Católica tiene una larga historia de creencia en signos paranormales", comentó John Travis, autor del libro Las profecías del Vaticano (2015). "Hay algo así como curiosidad y entusiasmo cuando algo así sucede porque parece confirmar la creencia tradicional de que Dios trabaja en nuestro propio mundo y, a veces, lo sobrenatural es visible entre nosotros".

Comenzó el domingo de Pentecostés, el 20 de mayo, cuando los feligreses de la Iglesia Católica Nuestra Señora de Guadalupe en Hobbs se percataron de que había algo parecido a unas lágrimas en los ojos de la Virgen María, según relató Judy Ronquillo, gerente comercial de la iglesia, a The Washington Post. Ella afirmó que la estatua siguió "llorando" al día siguiente, y que eso ha ocurrido algunas veces más.

Ronquillo tradujo las preguntas al español para el sacerdote, el reverendo José Segura, que dijo que en sus 12 años de sacerdocio nunca había visto algo así y que primero luchó para creer que eso era real. Pero, según admitió Segura, hay cámaras en la iglesia y no hay ninguna razón que explique qué es lo que pudo pasar. Asegura que si tuviera pruebas de eso, no continuaría con las especulaciones.

"Es algo extraordinario. No tiene palabras. Hubo un momento que él no creyó que eso fuera real, pero ahora sí lo cree" dijo Ronquillo sobre el sacerdote.

Las fotos y el video publicado por la iglesia muestran la figura con lo que parece ser líquido en los ojos, las mejillas, la boca y la barbilla. En una foto parece que la lágrima haya comenzado en los párpados superiores.

La figura de la Virgen María de la Iglesia Católica Nuestra Señora de Guadalupe en Nuevo México con lágrimas de aceite (Iglesia Católica Nuestra Señora de Guadalupe)
La figura de la Virgen María de la Iglesia Católica Nuestra Señora de Guadalupe en Nuevo México con lágrimas de aceite (Iglesia Católica Nuestra Señora de Guadalupe)

El diácono Jim Winder, vicerrector de la Diócesis Católica de Las Cruces, explicó que había suficiente líquido –alrededor de 500 mililitros- en la estatua. Señaló que él y otros investigadores examinaron la estatua y el área circundante, incluyendo el techo, y no había señales de que nada hubiera sido alterado de ninguna manera.

Winder indicó que los investigadores también hablaron con el fabricante de México y disiparon cualquier teoría de que la estatua, fundida en bronce, pueda estar goteando o secretando alguna sustancia.

Los investigadores recogieron alrededor de 5 mililitros (equivalente a una cucharadita) de las "lágrimas" y las analizaron. Winder relató que los resultados mostraron que tenía "la misma huella química del aceite de oliva tratado con algún tipo de aroma", como el crisma, aunque el color marrón no está asociado con la mayoría de los aceites de oliva.

"No creemos que el aceite de crisma haya sido utilizado para adulterar esta estatua", dijo Winder al tiempo que agregaba que los empleados de la iglesia no tienen ninguna explicación a este fenómeno. "No tenemos una explicación para eso", insistió.

Funcionarios de la Iglesia Católica no parecen estar tan preocupados por qué la estatua de la Virgen María pueda parecer que está "llorando" lágrimas aceitosas o por la procedencia de las lágrimas, ya sea de Dios, Satanás o el propio hombre. Aunque, eso sí, están viendo la respuesta de la comunidad ante este fenómeno. "Eso, con toda honestidad, es lo más importante: que haya motivado a las personas a estar más cerca de Dios. Eso es lo que realmente importa", dijo el diácono.

Winder recuerda que la Biblia habla de juzgar a un árbol por su fruto, por lo que, en su opinión, "queremos juzgar este fenómeno por lo que sale de la estatua".

Thavis, un autor y periodista que ha escrito sobre el Vaticano y otros asuntos religiosos, comentó que cuando aparecieron aparentes avistamientos sobrenaturales en la iglesia, muchos católicos fueron a buscar el favor de sus oraciones creyendo que Dios podría estar "proporcionando un vínculo directo" y "la gente lo quería aprovechar".

El experto religioso comentó que, en estas situaciones, el Vaticano generalmente permite que el fenómeno se desarrolle sin que se pronuncie sobre eso y cree que, en este caso, también pasará lo mismo con los obispos locales ya que las ocurrencias "a menudo, resultan ser engaños o se explican por la ciencia". Dice que puede tomar años para encontrar la respuesta y luego hay casos en los que, a pesar de una investigación exhaustiva, no se puede encontrar ninguna explicación.

Winder, de la Diócesis Católica de Las Cruces, señaló que, en este momento, los investigadores no han descubierto evidencia de que los hechos hayan sido producidos por el hombre, pero aún están monitoreando la situación.

"Si no es hecho por el hombre, eso deja dos posibles fuentes: Satanás y Dios", recalcó.