La defensa de Jorge Glas pidió a la CIDH y la ONU que el ex vicepresidente sea liberado y entregado a México

La defensa del ex vicepresidente ecuatoriano Jorge Glas informó este martes que presentó ante el Grupo de Trabajo Sobre Detención Arbitraria del Consejo de Derechos Humanos de la ONU y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) una solicitud para que sea liberado y entregado a México. El anuncio lo realizó el letrado Aitor Martínez durante una rueda de prensa en Guayaquil, donde el ex funcionario lleva recluido desde el pasado 6 de abril.

La petición fue presentada el pasado 19 de abril y apunta que Glas -arrestado tras la irrupción de la Policía de Ecuador en la embajada de México en Quito, donde se encontraba en calidad de asilado- fue víctima de un “secuestro” y “gravísimos malos tratos” durante este episodio que, derivó en una captura “ilegal y arbitraria”. Lo primero, señalaron, se debe a que el derecho internacional protege del accionar de las fuerzas de seguridad a las sedes diplomáticas mientras que lo segundo responde a la justificación de Daniel Noboa de que el ex vicepresidente planeaba fugarse.

Por otro lado, la abogada Sonia Vera denunció una “comunicación muy limitada” con su cliente, recluido en la cárcel de máxima seguridad de La Roca, y exigió “el restablecimiento de las comunicaciones y visitas y que se le asegure el derecho a un juicio justo”.

Así, Martínez declaró que “hemos insistido en la necesidad de que el Grupo de Trabajo active el procedimiento de urgencia y que, en un corto plazo, pueda haber algún pronunciamiento por parte de Naciones Unidas en relación a la situación de detención arbitraria”. A la par, pidió una visita de miembros del Grupo al ex funcionario.

A la CIDH, por su parte, le solicitaron una ampliación de las medidas cautelares otorgadas en 2019, cuando Glas se encontraba en prisión por las dos causas en las que ya fue condenado. Entonces, se pidió al Ejecutivo ecuatoriano que tome medidas para proteger su vida e integridad a las que, ahora, buscan sumar acciones previsionales que incluyan “su liberación inmediata y traslado a la Embajada de México o a otro Estado que quiera intervenir (en darle también asilo)”.

Mientras esperan la respuesta de estos organismos, el equipo legal de Glas inició también acciones legales tanto en México como en Alemania, país del que el político también posee ciudadanía.

Ante los tribunales de Berlín se llevó una denuncia por los delitos de privación de libertad, lesión corporal grave y coacción mientras que en el país americano fue la propia madre la que acudió a la Justicia.

Este martes, Norma Espinel denunció al presidente Noboa; a la ministra de Gobierno, Mónica Palencia Núñez; a la jueza de la Corte Nacional de Justicia, Rita Bravo Quijano; al comandante general de la Policía Nacional, César Zapata Correa; y al jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, Jaime Vela Erazo, ante la Fiscalía General de la República (FGR).

La mujer los acusa de secuestro, sometimiento a torturas, tratos crueles inhumanos y desaparición forzada, suscitados en el episodio de principios de abril.

Mientras en el exterior la familia busca medios para conseguir su liberación, dentro del penal Glas sigue sosteniendo su inocencia en el caso que lo investiga por presunto peculado en las obras de reconstrucción de unas localidades afectadas por el territorio de 2016 y mantiene su huelga de hambre a base de suplementos alimenticios y líquidos.

(Con información de EFE)