De una noche con Marc Anthony a los viajes en helicóptero: el dolor del hermano díscolo de Sebastián Piñera y los secretos de la relación

Miguel Piñera, empresario de la noche que llevó una vida muy diferente al ex presidente, contó en una entrevista televisiva detalles inéditos de la entrañable relación: “Él era mi padre y mi madre”

Compartir
Compartir articulo
Miguel Piñera contó que, antes de morir, su madre le encargó a Sebastián cuidarlo hasta que se muriera.
Miguel Piñera contó que, antes de morir, su madre le encargó a Sebastián cuidarlo hasta que se muriera.

(Desde Santiago, Chile) Es el ‘artista” de la familia, el hermano menor y definitivamente, era el preferido del expresidente Sebastián Piñera, quién murió la tarde del martes pasado al capotar el helicóptero que manejaba sobre el lago Ranco (920 kms al sur de Santiago).

En entrevista televisiva a CHV, Miguel Piñera, un conocido empresario de la noche que ha tenido varias discotecas, contó detalles desconocidos de su cercana relación con el exmandatario, así como también la manera en que se enteró del trágico accidente.

“Me llamó un amigo que estaba en Lago Ranco y me dijo “Negro, ¿tu hermano tiene un helicóptero blanco?” Yo le dije “sipo”. Me dijo que vio que se cayó un helicóptero al lago. “Supongo que no era tu hermano”, me dice. No tengo idea, compadre, le dije. Ahí empecé a averiguar, era mi hermano. Fue tan inesperado, estaba viviendo un momento tan lindo”.

Sobre su estrecha relación, Miguel confidenció que cuando “mi madre agonizó, tenía muchos dolores por la artritis. Y llamó a mi hermano cuando se dio cuenta que en cualquier momento se iba. Le hizo poner la mano en la biblia y le dijo: “Sebastián, tú tienes que hacerte cargo de Miguelito”. Y la verdad es que se hizo cargo de mí. Muy cariñoso, me llamaba siempre. Fue muy tierno conmigo Sebastián”.

 Miguel Piñera es conocido en la noche chilena y por sus noviazgos con voluptuosas modelos
Miguel Piñera es conocido en la noche chilena y por sus noviazgos con voluptuosas modelos

Por esa razón, aseguró, “me siento totalmente huérfano. Como te digo, él era mi padre y madre. Mi viejo y mi vieja se murieron hace mucho tiempo. Me llamaba día por medio y me decía “Negro, ¿cómo estai? ¿qué necesitas?” Hay un mito que decía que Sebastián me depositaba (dinero). Eso es un mito porque toda la vida he trabajado. Estuve en más de 30 boliches, pubs y discotecas. Recorrimos Estados Unidos en moto hace 30 años atrás, hice una campaña senatorial, canté en las dos campañas presidenciales y recorrí todo Chile con él. Anduve en ese helicóptero y compartí mucho con mi hermano. Éramos muy cercanos”.

Dicha cercanía se cimentaría desde pequeños, pues “compartíamos la pieza en la casa, él era mi compañero de habitación. Y toda la vida me cuidó. Me protegía, por ejemplo, cuando estábamos en Estados Unidos o cuando mi padre fue embajador en Bélgica. Ahí sufrí mucho bullying porque yo no hablaba francés. Entonces en el colegio en ese tiempo tenía diez años y Sebastián era el que me defendía del bullying. Yo era el regalón de Sebastián, no tengo palabras para contar todo el dolor que tengo dentro del corazón”.

Ya un poco más grandes, resultó ser Miguel quién introduciría a Sebastián en algunos círculos sociales. “En el año 89 nadie conocía a Sebastián, entonces se los presentaba a mis amigos y amigas. Les decía: “Ahí viene mi hermano Sebastián, que viene de candidato a senador más joven”. Y a él no le gustaba mucho la gente. Porque acuérdate que en el año 89 fueron años difíciles, cuando volvimos a la democracia. Y Sebastián llegaba a cantar y le gustaba cantar rancheras. Cuando tenía mis boliches el “Entrenegros”, el “Tutix”, lo hacía cantar. Y mi hermanito una vez que se subía, no había como bajarlo”.

De fiesta con Marc Anthony

El hermano díscolo continuó su relato: “El último viaje que hicimos fuimos a Punta Cana, República Dominicana, a pasar año nuevo todos los Piñera Morel, con todos los nietos. 14 nietos, más los cuatros hijos, éramos como no sé cuántos Piñera. Entonces nos invitó a una fiesta en su casa el Presidente de República Dominicana, en Punta Cana y llegamos y estaba cantando Marc Anthony…”Voy a vivir, voy a vivir mi vida la la la…”. Cantamos juntos, nos tomamos unas copitas y enganchamos, Sebastián enganchó y estuvimos cantando con Marc Anthony toda la noche”.

Miguel Piñera acompañó a su hermano durante sus campañas presidenciales
Miguel Piñera acompañó a su hermano durante sus campañas presidenciales

Consultado sobre si se había subido alguna vez al fatídico helicóptero, señaló que “yo siempre le tuve miedo. Nadie quería subirse. Viajamos harto en ese helicóptero y cada viaje era terrible. Una vez le pedí que por favor me quería bajar. Íbamos para el norte y justo había un cerro bajito. Y le dije: Hermano, sabí que más, déjame en la punta de ese cerro. “¿Estai seguro, Negro?”, me dijo. Porque no había nada. Íbamos con Andrés Allamand y Alberto Espina. “¿Te querí bajar?”, y aterrizó. Y miré bien y le dije sabí que más, sigamos no más. No había nada alrededor”.

Sobre la personalidad del exmandatario, aseguró que “era competitivo a muerte. Los partidos de tenis eran a todo… y éramos parejitos. Le gustaba mucho jugar a la pelota, era comilón… yo también. Hacía todos los deportes extremos: parapente, buceando, de piloto, bueno para el caballo, bueno para andar en moto, salíamos en bicicleta. Hacía todos los deportes. Era una persona de otro mundo”.

“Una de las virtudes de mi hermano es que no tenía ningún rencor. Todo lo que le dijeron y él siguió en comunicación con todos. Llamaba mucho al Presidente Boric, al Presidente Frei, a la Sra. Bachelet. Nunca hubo rencor”, aseguró.

Finalmente, Miguel agradeció las muestras de cariño de los chilenos. “Agradezco mucho a todo el país, a la gente… todo el cariño y reconocimiento que le dieron en el ex congreso. Toda esa gente haciendo colas de cinco horas con el calor… ahí lo lloré todo y saludé a todo el mundo. El cariño de la gente era impresionante. Nunca pensé que mi hermano fuera tan querido. Era un buen hombre, un buen hermano, un gran padre, un gran abuelo y un tremendo presidente que Chile finalmente se lo reconoció al final”.