Escándalo por promoción de bar: usuarios acusan prácticas de discriminación racial

Un conocido bar, con sedes en Barranco y Pueblo Libre, se encuentra en el ojo de la tormenta, debido a que es acusado por promover la discriminación racial con polémica publicación. Uno de los temas centrales era que el precio de la cerveza iba a variar de acuerdo al distrito del cliente.

A través de Instagram, el establecimiento Tempo publicó imágenes con mensajes como “Deberás llevar tu distrito en el pecho y mientras más horrible sea, más barata será tu chela”.

Luego, armaron un listado de distritos como, por ejemplo, los que viven en San Juan de Lurigancho, Villa El Salvador o Puente Piedra pagarían 12 soles, mientras que los residentes de Miraflores, San Borja y San Isidro abonarían S/16.

Además, publicaron un video de una fiesta con una voz en off: “¿Te discriminan por ser conero? Ven a una fiesta donde también te discriminarán, pero tu chela te saldrá más barata, porque este viernes tendremos fiesta de discriminación invertida en Tempo”.

Mediante X (antes llamado Twitter), los usuarios expresaron su descontento con esta publicación. “Dijeron arriba los clasistas y estos se fueron hasta la estratosfera”. “Y a esto lo llaman marketing”, “Esto es vergonzoso” o “No se puede normalizar la discriminación o racismo”, fueron algunos de los comentarios.

Por su parte, en Instagram, los internautas tuvieron una reacción contraria a las anteriores, debido a que suavizaron este post y lo respaldaron. Incluso, muchos lo tomaron con buen humor y aseguraron su presencia.

El periodista, docente y especialista en derecho humanos, Manuel Herrera, conversó con Infobae Perú con respecto a este tema y mencionó que “al principio, parecía una publicación positiva y pintoresca porque era mientras más lejos vives, más barato te sale una cerveza”. Sin embargo, señaló que “es negativo en realidad porque se burlan y lo toman en broma. Es excluyente y discriminatorio”.

El experto indicó que “hay falta de creatividad y carencia de profesionales como comunicadores para la producción de esta publicación. Me apena que se utilice la tecnología (edición de fotos) para discriminar”.

Herrera se mostró preocupado y cuestionó si es que en este establecimiento se ponen afiches con el lema “En este lugar no se permite la discriminación de ningún tipo”. “Creo que acá deberían involucrarse las autoridades de las municipalidades y supervisar este centro que brinda un servicio público”, expresó.

De acuerdo con la página Alerta contra el racismo del Ministerio de Cultura, la discriminación étnico-racial se define como “todo trato diferenciado, excluyente o restrictivo hacia una persona o grupo, motivado por las características físicas (como el color y tipo de piel o cabello, facciones, estatura, entre otros) y étnico-culturales (lengua materna, acento o dejo, costumbres, indumentaria, símbolos, creencias y otras prácticas culturales o formas de vida, identificación y pertenencia a un grupo étnico o cultural) que tiene como resultado el limitar sus derechos y/o libertades fundamentales”.

Desde el 2000, la discriminación fue incorporada como delito en el artículo 323 del Código Penal a través de la Ley contra Actos de Discriminación (Ley Nº 27270). Esta normativa sufrió modificaciones en 2006, 2013 y 2014, y en la actualidad establece castigos que van desde penas privativas de libertad de dos a tres años e incluso, la posibilidad de servicios comunitarios por 60 a 120 jornadas para los infractores.

En casos donde el autor del delito sea un funcionario o servidor público, la pena se incrementa a un rango de dos a cuatro años de prisión, además de la inhabilitación.

Además, de acuerdo con la Ley Nº 31199, el artículo 7 del capítulo II explica que los ciudadanos tienen el derecho a acceder y permanecer en espacios públicos sin ser objeto de discriminación y con normativas que promueven su conservación.