El milagroso año del Girona: cómo ha pasado de luchar para evitar el descenso a clasificarse para Champions

Tras hacer soñar a sus aficionados durante todo el año con la competición europea, ahora han hecho de estas aspiraciones una realidad al registrar su nombre en la competición de las estrellas

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Los jugadores del Girona celebran la clasificación de su equipo para la Liga de Campeones (EFE / David Borrat)
Los jugadores del Girona celebran la clasificación de su equipo para la Liga de Campeones (EFE / David Borrat)

El Girona está registrando una temporada para enmarcar, escribiendo su nombre en los libros de historia del fútbol español y europeo. Mantenerse toda la temporada en la parte alta de la tabla, codeándose con los grandes de la competición como el Real Madrid, el Barcelona o el Atlético de Madrid ha sido su hazaña más destacada, aunque no ha sido la única. Tras hacer soñar a sus aficionados durante todo el año con la competición europea, ahora han hecho de estas aspiraciones una realidad al registrar su nombre en la competición de las estrellas, la Champions; venciendo nada más y nada menos que al Barcelona por 4-2.

Hace tan solo dos años el Girona ni siquiera estaba en primera, sino luchando en la liga de plata por recuperar su plaza en la máxima competición nacional. Durante la temporada 2018-19, el equipo albirrojo no pudo mantener su plaza en Primera, y certificó su viaje a la Segunda División con el Huesca y el Rayo como acompañantes.

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Sin embargo, tras dos intentos frustrados, finalmente en junio de 2022, el equipo catalán logró su billete de vuelta a la máxima competición española. Durante la temporada 2022-23, el Girona llevó a cabo una actuación con luces y sombras, con dos jornadas en puestos de descenso. Finalmente logró afianzarse en mitad de tabla y concluir la competición en décimo puesto.

Ahora, ese mismo equipo, también con Michel como maestro de ceremonias guiando a sus jugadores, no solo ha conseguido mantenerse a salvo y lejos de los puestos de descenso durante toda la temporada, sino que se ha desmarcado como uno de los equipos más temidos de la competición alzándose con la victoria ante los grandes de la competición como el Barcelona o el Atlético de Madrid, lo que le ha servido para mantenerse en lo alto de la tabla, comiendo en la mesa de los grandes clubes españoles.

El jugador del Girona, Portu (REUTERS/Albert Gea)
El jugador del Girona, Portu (REUTERS/Albert Gea)

A lo largo de la temporada el club albirrojo ha ostentado incluso la corona de campeón de LaLiga durante varias jornadas (aunque finalmente ha cedido la balanza en pos del Real Madrid, que ya es matemáticamente campeón de competición nacional) y se ha disputado el segundo puesto junto al Barcelona, de quienes actualmente tan solo les separa un punto, con el Girona por delante tras la victoria de este fin de semana por 4-2, con goles de Dovbyk, dos de Portu y Miguel Gutiérrez.

EL Girona en territorio Champions

La victoria en el derbi catalán no es lo único que celebraron los albirrojos. Además de jugarse el segundo puesto en LaLiga y una victoria ante el club más grande de la comunidad, los del Girona tenían en mente otro objetivo. Ese con el que llevaban soñando desde principios de temporada, cuando vieron que iban cosechando victoria tras victoria y los puntos en la tabla no dejaban de su subir. Ese fútbol abrasador que ha derrochado el Girona durante toda la competición ha llegado a su punto culminante y ya están recogiendo los frutos.

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Con una temporada que ha ido en aumento jornada tras jornada, el Girona ha registrado un año casi perfecto, logrando prácticamente todos los objetivos que se marcaron a principios de temporada e incluso más. Tras asegurar su permanencia en primera, consiguieron batir récords de puntos, con 74 en su saca personal, algo que solo habían conseguido los tres mastodontes de la competición: Real Madrid, Barcelona y Atlético de Madrid.

Ahora el Girona se suma a esta lista de élite al sumar tal cantidad de puntos en 34 jornadas. Su última hazaña y no por ello menos importante, sino todo lo contrario, ha sido sellar su nombre en el cuadro de la Champions, donde luchará con los grandes de Europa por alzarse con la orejona durante la próxima temporada.