Los aficionados del Athletic pitan tímidamente el himno de España y entonan el suyo durante la final de Copa del Rey

Lo sucedido en las últimas semanas en el ente de la Real Federación Española de Fútbol marcará esta final de la Copa del Rey entre el Athletic de Bilbao y el RCD Mallorca. La Operación Brody llevada a cabo por la Guardia Civil en busca de contratos irregulares en la entidad durante los cinco años de mandato de Luis Rubiales han puesto patas arriba la actualidad de estas últimas semanas. Esto, sumado a la dimisión del presidente, Pedro Rocha, para convocar nuevas elecciones en la Federación, deja un palco un tanto complicado en el Estadio de La Cartuja.

La final ha estado presidida por su majestad el Rey, Felipe VI. En el puesto de Pedro Rocha, será Rafael del Amo, presidente de la territorial de Navarra desde 2016 y vicepresidente de la Federación con Luis Rubiales, el que representará a la entidad. Además, estarán presentes cuatro ministros del actual gobierno, empezando por María Jesús Montero, vicepresidenta primera, además de Pilar Alegría, ministra de Educación, Víctor Torres, ministro de Política Territorial, y Fernando Grande Marlasca, ministro del Interior. Los alcaldes de Bilbao (Juan María Aburto) y Palma (Jaime Martínez) también estarán en la zona de honor de La Cartuja.

Los precedentes en el momento previo al inicio del partido para escuchar el himno nacional auguraban pitidos. En la final de 2023 entre el Real Madrid y la Real Sociedad, miles de aficionados osasunistas abuchearon los acordes nacionales. Este año no ha sido menos, aunque parece que la petición del Athletic en sus redes sociales previos al partido donde hacían una constante alusión a la palabra “respeto” ha hecho efecto, y esta noche los pitidos han sido bastante ‘tímidos’, y el cántico y bufandeo superaba a estos abucheos.

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La final de La Cartuja dejará un buen pellizco en las arcas de ambos clubes. El sistema de reparto económico de esta competición es complejo y no especialmente cuantioso, pero en resumen: el ganador solo consigue sumar 1.200.000 euros a sus arcas y el subcampeón, alrededor de un millón. La Copa ingresa, por derechos televisivos, unos 33 millones cada temporada. Y esa cifra es la que empieza a dividirse en distintas ramas. Muchas. Para empezar, el 90% se destina al fútbol profesional (unos 29,5 millones) y el 10% restante, al fútbol aficionado y sus participantes en la Copa (algo más de tres millones).

De esos 29,5 millones que van a parar al fútbol profesional, que es lo que atañe a Mallorca y Athletic: el 90% va a los clubes de Primera y el 10%, a los de Segunda. Es decir: quedan unos 26,5 millones de euros para los 20 equipos de LaLiga EA Sports. Pues de ese dinero y aquí acaba el árbol monetario, el 50% se reparte de manera idéntica entre los 20: Athletic, Mallorca y los otros 18, ya se habían asegurado unos 660.000 euros.