¿Es imposible predecir el clima? Los meteorólogos empiezan a reconocer el problema que llevan teniendo desde hace un año

Los expertos en el clima han visto cómo en 2023 la temperatura general del planeta fue más elevada de lo que pronosticaban sus modelos

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Una lancha ligera recorre, entre trozos del deshielo, las aguas que rodean la Antártida (EFE/Cézaro)
Una lancha ligera recorre, entre trozos del deshielo, las aguas que rodean la Antártida (EFE/Cézaro)

A principios de esta semana, se supo que el mes de marzo de 2024 había sido más de dos grados más cálido que los marzos de los últimos treinta años. Esta noticia venía precedida por otros nueve récords consecutivos previos, que mostraban cómo, desde junio de 2023, la línea roja del termómetro del planeta no ha dejado de subir.

“La temperatura promedio global de los últimos doce meses (abril 2023 y marzo 2024) es la más alta registrada, con 0,70 °C por encima del promedio de 1991-2020 y 1,58 °C por encima del promedio preindustrial de 1850-1900″, explicaba el Servicio de Cambio Climático Copernicus (C3S) en su informe. Este fenómeno ha provocado cierta confusión en los científicos expertos en el clima. Hace unos días, el director del Instituto Goddard de Estudios Espaciales de la NASA, Gavin Schmidt, reconoció en un artículo en la revista Nature que los modelos para el año 2023 habían sido erróneos a la hora de predecir el clima y que necesitaban “con urgencia” más y mejores datos.

¿Por qué ya no pueden predecir el clima?

Gavin Schmidt lleva prediciendo el clima desde hace ocho años. No obstante, pese al prestigio del cargo que ocupa y los recursos de los que goza en la NASA, este experto se ha visto obligado a admitir que “ningún año ha confundido más las capacidades predictivas de los científicos del clima que 2023″, un hecho que él ve como “una lección de humildad”, pero también como “un poco preocupante”.

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08/04/2024 Marzo de 2024 continuó la secuencia de récords climáticos.

Marzo de 2024 fue más cálido a nivel mundial que cualquier marzo anterior en el registro de datos, convirtiéndose en el décimo mes consecutivo más cálido registrado para el respectivo mes del año.

POLITICA INVESTIGACIÓN Y TECNOLOGÍA
C3S/ECMWF.
08/04/2024 Marzo de 2024 continuó la secuencia de récords climáticos. Marzo de 2024 fue más cálido a nivel mundial que cualquier marzo anterior en el registro de datos, convirtiéndose en el décimo mes consecutivo más cálido registrado para el respectivo mes del año. POLITICA INVESTIGACIÓN Y TECNOLOGÍA C3S/ECMWF.

Esta confusión se debe a que, durante los últimos nueve meses, las temperaturas de la superficie terrestre ha superado todos los récords previos de calor, una tendencia que se espera que continúe debido al aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero. No obstante, “este repentino aumento de calor supera con creces las predicciones realizadas por modelos climáticos estadísticos”, ha advertido Schmidt, que también ha reconocido que “se han propuesto muchas razones para esta discrepancia, pero, hasta el momento, ninguna combinación de ellas ha podido conciliar nuestras teorías con lo sucedido”.

Su confusión, en gran medida, parte del hecho de que a principios de 2023 La Niña, un fenómeno climático que enfriaba las aguas del Pacífico, llevaba tres años presente y solo en ese momento iba a dejar paso a El Niño, un fenómeno inverso que, no obstante, comenzó a detectarse solo en la segunda mitad del año. “Varios científicos del clima, incluido yo, calculamos que las probabilidades de que 2023 resultase ser un año con récords de calor eran solo del 20%”, ha explicado. Esta predicción, no obstante, resultó errónea, ya que a partir de marzo las temperaturas comenzaron a dispararse, meses antes de la llegada de El Niño.

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La contaminación tampoco ofrece una respuesta

Pese a que los gases de efecto invernadero han seguido aumentando su presencia en nuestra atmósfera, lo cierto es que su aumento, según el experto, solo serviría para explicar una subida de 0,02 grados, algo parecido si se ponderara el efecto de los aerosoles. Otra teoría que se ha barajado es que el calentamiento haya sido producido por el debilitamiento de los efectos de una gran erupción volcánica que tuvo lugar en la Polinesia durante 2022, y cuyos gases pueden haber enfriado durante estos años nuestro planeta. Pero, de nuevo, este enfriamiento sería de apenas unas centésimas.

“Incluso después de tener en cuenta todas las explicaciones plausibles”, explica Schmidt, “la divergencia entre las temperaturas medias anuales esperadas y observadas en 2023 sigue siendo de aproximadamente 0,2 grados”, una medida que es, precisamente, la misma que explica la diferencia de calor entre este último año y el anterior. Finalmente, el experto ha recordado que “gran parte del clima mundial está impulsado por vínculos intrincados y de largo recorrido, conocidos como teleconexiones”. Descifrar las modificaciones que se puedan producir ahí, en tiempo real, debe de ser uno de los retos que la ciencia debe afrontar. “Necesitamos respuestas sobre por qué 2023 resultó ser el año más cálido posiblemente en los últimos 100.000 años”, ha terminado Schmidt, “y los necesitamos rápidamente”.

Las olas de calor son cada vez más frecuentes. Sin embargo, la AEMET confirma que aún no hay evidencia para sostener si cada vez son más graves o no, pero los picos de temperatura cada vez son más altos