Escándalo en Inglaterra: una figura de la selección de rugby fue arrestado y reducido con una pistola Taser tras agredir a un policía en un bar

El hecho ocurrió en una discoteca de Mallorca, España. Las autoridades debieron reducir a Billy Vunipola, quien además amenazó a otros clientes con sillas y botellas. Los detalles

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Billy Vunipola fue arrestado en Mallorca tras agredir a un policía (Foto: David Rogers/Getty Images)
Billy Vunipola fue arrestado en Mallorca tras agredir a un policía (Foto: David Rogers/Getty Images)

Un nuevo escándalo internacional tuvo como protagonista al jugador de la selección inglesa de rugby, Billy Vunipola, quien se encuentra en el centro de la polémica después de un llamativo incidente que vivió en un bar de Mallorca, que concluyó con su arresto y acusación por “desobedecer y agredir a un oficial de policía”. El episodio tuvo lugar en el bar Epic en Palma, la capital de la isla española, a las 4:30 de la madrugada del domingo, después de que el personal de seguridad alertara a las autoridades sobre la conducta del deportista. Según varios testigos, el jugador de 31 años se había quitado la camiseta y estaba amenazando a clientes y empleados con botellas y sillas.

Los efectivos respondieron al llamado del encargado del local nocturno y utilizaron una pistola taser en dos ocasiones para contener a Vunipola, quien supuestamente desafió a los agentes y se resistió al arresto, incluso después de ser esposado. Luego fue trasladado al hospital Son Espases para ser evaluado y detenido, donde tuvo que ser sedado y atado a la camilla.

El rugbier oriundo de Australia, pero criado en el Reino Unido, compareció ante un tribunal el domingo y fue multado con 240 euros después de ser acusado de resistencia a la ley. En un comunicado emitido el lunes, el jugador negó las acusaciones de violencia y aseguró que cooperaría con el proceso interno de su club, los Saracens, y se disculparía por cualquier inconveniente causado.

Por su parte, el portavoz de la Policía Nacional de Mallorca confirmó el arresto de un extranjero de 31 años por desobedecer y agredir a un oficial de policía en el bar Epic de Palma. El hombre, identificado como Vunipola, presuntamente provocó disturbios en el establecimiento y se resistió violentamente al arresto.

Vunipola durante un partido del último Mundial de Francia que jugaron Inglaterra y Sudáfrica
Vunipola durante un partido del último Mundial de Francia que jugaron Inglaterra y Sudáfrica

Con el transcurso de las horas, Los Saracens emitieron un comunicado expresando su conocimiento sobre el incidente y declarando que tomarían medidas internas al respecto. Este incidente no es el primero en el que Vunipola se ve envuelto en controversia, dado que el año pasado fue suspendido por tres partidos después de una peligrosa entrada alta durante el Mundial de Rugby, y anteriormente había generado polémica por comentarios inapropiados hacia su entrenador.

“Puedo confirmar que estuve involucrado en un desafortunado malentendido cuando salía de un club en Mallorca que se salió de control. Al contrario de lo que informan los medios, no hubo violencia, ni pelea y no amenacé a nadie en ningún momento, ni con botellas, ni con sillas, ni con nada más. Me acusaron de resistencia a la ley y, tras un juicio exprés, pagué una multa de 240 euros. La investigación de la policía española ya está cerrada y hoy vuelo de regreso al Reino Unido”, explicó el propio deportista en un descargo. Y continuó: “Obviamente cooperaré con el proceso interno de los sarracenos y me disculparé sin reservas por cualquier inconveniente para todos los involucrados”.

Su mirada se contrapone a la del portavoz oficial de la policía de las Islas Baleares, ya que en declaraciones brindadas ante la prensa española detalló: “Los hechos tuvieron lugar en un establecimiento de ocio en primera línea de mar de Palma, cuando un hombre provocaba altercados y sin querer atender los pedidos de los encargados de seguridad del lugar, se enfrentó al resto de clientes. De inmediato, la policía fue alertada y los agentes, al ver al hombre, que estaba sin camisa y haciendo gestos con las manos, abordaron el lugar. Fue entonces cuando se enfrentó a la policía e intentó agredir a los efectivos. Los policías intentaron en todo momento que se calmara, pero el hombre no atendía a razones. En ese momento, el sujeto empujó y abofeteó a un oficial y un policía sacó su pistola paralizante eléctrica y disparó por primera vez, aunque el arma no se ejecutó. Seguidamente se disparó un segundo proyectil que cumplió su objetivo, y fue entonces cuando los agentes se abalanzaron sobre él y procedieron a inmovilizarlo encadenándolo, trasladándolo posteriormente al hospital de Son Espases para su valoración y detención”.

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